Malas comunicaciones entre puertos y Aduana de EE.UU aumentan congestión

Como si no fuera suficiente, los puertos de EE.UU enfrentan una brecha en su comunicación con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de ese país. Como resultado, los Puertos no son informados sobre la llegada de charters no programados, lo que resultó en que algunos buques estuvieran anclados durante más de un mes.

Debido a la directriz actual que permite a un buque avisar a un puerto con 96 horas de anticipación antes de su llegada, los agentes de carga marítima chinos están cargando buques sin garantía de un espacio en los puertos de destino.

Aquí es donde entra en juego la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) de EE. UU. Esta entidad requiere que todas las embarcaciones que buscan autorización para ingresar a los puertos de los EE. UU., presenten sus manifiestos con el Sistema de Manifiesto Automatizado (AMS) de la CBP, 24 horas antes de que la embarcación salga del puerto de carga. Este requisito le da a la CBP un ​​aviso con varias semanas de anticipación sobre la llegada del buque, cuando la información se transmite a tiempo al puerto, este podrá prepararse para que la embarcación no genere retraso alguno al recibir la embarcación.

Además, los barcos alquilados no tienen los mismos canales de comunicación con las terminales que las líneas de barcos de vapor más importantes, para programar un lugar de aterrizaje. Los barcos fletados a menudo notifican a los puertos unas horas antes de la llegada, lo que agrega otro barco a una cola que ya es más larga de lo normal, y esto atenúa aún más el cuello de botella. 

“Necesitamos vincularnos con la Aduana en el fletamento de estas empresas no tradicionales para que podamos tener una línea de visión más profunda”, dijo Gene Seroka, director ejecutivo del Puerto de Los Ángeles.

Según Marine Exchange, si bien los barcos no programados cumplen con el “proceso de aviso previo de llegada”, sus amarres no están disponibles, lo que los obliga a anclar hasta que lo estén. En este escenario actual de la cadena de suministro, esto significa una espera que se puede alargar por semanas.